Fundada en la ciudad de Nova Trento en el estado de Santa Catarina, Brasil, donde está ubicada hasta el día de hoy, Ruberti Molduras es el resultado de la visión emprendedora de su fundador, Virgilio Inácio Ruberti, ex agricultor de una familia de origen italiana, que al trabajar como fotógrafo en principios de los años 1980 se dio cuenta que no había en el mercado de su región productos para enmarcar los recuerdos más especiales de la gente, como fotografías y obras de arte.

Surgida del absoluto cero y con las más grandes dificultades, desde la falta del capital hacia el desconocimiento absoluto de cualquier dato del proceso de producción, Ruberti Molduras ha crecido gracias a la obstinación de su fundador y al esfuerzo de todos los empleados que estuvieron en la empresa.

En sus 36 años de historia con base en la mejoría constante, en el comprometimiento de las relaciones con sus clientes y en la permanente búsqueda por la calidad, muestran la solidez y seriedad que hoy hace de Ruberti una de las más grandes empresas de molduras en Brasil.

Junto a todo esto compromiso, está el cariño, la atención y el esfuerzo dedicados a la producción de cada moldura. Una relación de afecto que trasciende el espacio industrial y toca las relaciones humanas que la empresa cultiva con empleados, proveedores y cliente.

Ruberti Molduras está totalmente estructurada para producir molduras que atiendan a las exigencias de sus clientes de Brasil e internacionales, tanto en la calidad como en el artístico. Para tanto, invierte fuertemente en tecnología, diseño y mejoría de todos los sectores productivos, especialmente en el centro de investigación y desarrollo y en la tecnología de la información.

Es el arte inspirando la vida. Es la tradición que se reinventa en la innovación.

Ruberti Molduras desea que el entusiasmo de sus clientes al adquirir sus productos sea tan expresivo cuanto la felicidad y motivación que tenemos en producirlos todos los días.